Por Víctor Valentin, presidente de SAVAL FG
Hace unas semanas atrás hicimos público nuestro rechazo al alza desmedida e inédita de los avalúos agrícolas para el 2020 que tiene una subida sin precedentes, que no guarda relación con el desempeño económico del sector y afecta a la mayoría de los agricultores (52%). Para que se hagan una idea, si comparamos el reavalúo actual con el último del año 2016, se aprecia un incremento promedio enorme de 132% en cuatro años, comparado con un 25% en los siete años anteriores.
Junto a otros gremios sostuvimos una serie de encuentros con el Ministerio de Hacienda para revisar esta problemática, pero la Autoridad se ha negado a revisar el tema y a cambio convocó a una mesa de trabajo para ver qué aspectos de nuestro sector se podrían mejorar, siendo que a nuestro entender los parámetros para el reavalúo son los que no corresponden.
El primer encuentro se realizó el pasado jueves y como Consorcio Agrícola del Sur presentamos una serie de necesidades que alivien este desmedido aumento, porque claramente desincentiva a un sector tan importante para la producción de los alimentos, sobre todo ahora en épocas de pandemia. No obstante fuimos claros, no vamos a transar y agotaremos nuestros esfuerzos en la modificación de las alzas para el 2020 que tiene una subida sin precedentes.
En una medida inédita, inesperada y desproporcionada, ya que el SII ha reajustado en casi un 100% (promedio país) los avalúos fiscales de los predios agrícolas. Ésta, es una valorización no comercial que realiza el fisco sobre un predio o bien raíz, con el fin de establecer una contribución a pagar (Ley 17.235 sobre impuesto territorial). El aporte o contribución, dice relación con el potencial productivo del predio y se calcula utilizando como base la superficie total del predio, su tipo de suelo (clasificación de suelos), la distancia hacia la cabecera comunal, y la región o comuna en que se ubica (tipo de clima).
Los avalúos fiscales no son una tasación comercial, ni distinguen la capacidad de gestión de los propietarios, como ocurre en las tasaciones bancarias, que tienen por finalidad evaluar el riesgo para una operación financiera con un empresario. Usar tasaciones bancarias como fuente de información o transacciones de predios que pasan al sector inmobiliario, que pagan sus impuestos correspondientes y salen del sector productivo, es un error y puede inducir a interpretaciones equivocadas.
Seguiremos insistiendo sobre estas materias, tales como la renta pesunta y el presionar para cambiar el sistema contable de los productores es factible, pero consensuado y en plazos razonables. Todo esto, en el marco para que los agricultores se puedan dedicar a lo que mejor hacen, producir los mejores alimentos para los chilenos y chilenas.