
Desde hace algunas semanas, observamos con creciente inquietud a los productores de trigo en la zona central, quienes, debido a su ubicación geográfica y clima favorable, inician la cosecha antes. Estos agricultores han venido alertando sobre los preocupantes precios ofrecidos por los diversos molinos en general. Fundamentan sus reclamos en la comparación con los precios internacionales y la notable diferencia de calidad del trigo nacional.
SAVAL FG, ha participado activamente en las Comisiones de Agricultura tanto de la Cámara de Diputados como en la del Senado, hemos instado a las autoridades a ser conscientes del impacto grave que estos bajos precios pueden tener en nuestros agricultores a nivel nacional. Resulta sumamente complicado para el sector triguero enfrentar condiciones de precios que se definen en el momento de la cosecha, generando incertidumbre. Esto no solo convierte los esfuerzos y dedicación en deudas, sino también en fuente de frustración.
Comprendemos la dinámica del sistema de libre comercio, donde la oferta y la demanda juegan un papel preponderante en la economía. No obstante, consideramos que es injusto que nuestros productores nacionales, responsables de un alimento tan esencial como el trigo —fundamental en la alimentación de los hogares chilenos—, sean tan poco valorados. Como gremio, percibimos un desincentivo evidente entre nuestros socios productores, agravado por la falta de respaldo del Gobierno a través de COTRISA en la gestión de la protección de precios.
La nula eficacia del mecanismo actual queda patente, Nos preguntamos si la participación de COTRISA en la regulación de precios es verdaderamente relevante, nos preocupa profundamente. Nuestra misión es salvaguardar los intereses del sector agrícola, cuyos miembros trabajan incansablemente para proveer alimentos a los hogares chilenos día tras día. Es imperativo continuar abogando por políticas públicas que protejan a los pequeños, medianos y grandes productores privados, quienes, además, son generadores de empleo para cientos de familias, dinamizando así la economía local y nacional.
Es crucial manifestar nuestra solidaridad con los agricultores de la zona central, uniéndonos en un llamado conjunto para preservar y fortalecer nuestra posición frente a esta problemática. La unidad entre los gremios es esencial para enfrentar los desafíos que afectan a la agricultura, consolidando así un frente común que permita salvaguardar el sustento de las familias que dependen de este vital sector.